CANINDEYÚ. Agentes de la Secretaría Nacional Antidrogas (SENAD), en conjunto con el Ministerio Público y la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC), llevaron a cabo ayer el Operativo Ignis contra el grupo criminal de alta peligrosidad liderado por Felipe Santiago Acosta Riveros, alias “Macho”. Tras un enfrentamiento con los presuntos narcotraficantes, los efectivos lograron incautar un arsenal y detuvieron a nueve sujetos, entre ellos al supuesto socio de Acosta, Ricardo Picolotto. Durante el operativo murieron otros nueve presuntos pistoleros del individuo más buscado del país.
Los agentes de la SENAD, en acción con el Ministerio Público y el apoyo de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC), realizaron los procedimientos en simultáneo en la localidad de La Paloma del Espíritu Santo y Salto del Guairá, en el departamento de Canindeyú, con el objetivo de desmantelar la estructura criminal dirigida por Felipe Santiago Acosta Riveros, alias “Macho”.
De acuerdo con lo informado por las autoridades, las incursiones se realizaron tanto por aire como por tierra, lo cual resultó en enfrentamientos entre los criminales y las fuerzas de seguridad. Asimismo, pudieron confirmar la alta peligrosidad de dicha banda criminal, ya que tenía en su poder un arsenal de armas de grueso calibre, como una ametralladora antiaérea calibre .50mm.
Tras el enfrentamiento, los agentes reportaron que nueve personas pertenecientes al grupo criminal fallecieron durante el tiroteo. En tanto, por el lado de las fuerzas de seguridad no se reportaron víctimas fatales, ni heridos.
Los intervinientes lograron incautar una importante cantidad de armas de grueso calibre, municiones, chalecos antibalas, indumentarias tácticas, además de varios celulares, joyas, documentos de identidad y droga (marihuana), así como también pudieron detener a nueve personas.
DETENIDOS
Entre los aprehendidos se encuentra el que sería jefe del conocido narco Santiago Acosta, alias “Macho”, el brasilero Ricardo Luiz Picolotto Pedroso, alias “R7”, quien sería el nexo con la facción criminal brasilera Primer Comando da Capital (PCC), y el hermano de “Macho”, Eusebio Acosta Riveros. Los otros detenidos fueron identificados como Heriberto Roa Coronel, Hugo Ramón Benítez, alias “Gordo”; Hugo César González, Alfredo Guzmán Portillo, Cristian Santiago Martínez, Sergio Denis Medina Benítez, Gabriel Fernando De Santos, alias “Gordiño”, y Carlos Daniel Castro Wenceslao, estos últimos de nacionalidad brasilera.
Aunque se confirmó que Santiago Acosta sigue prófugo, los operativos en el décimo cuarto departamento continuarán hasta encontrarlo.
TRÁFICO DE DROGAS Y ARMAS
Según las investigaciones. “Macho” y su organización se dedica al tráfico de armas, además de controlar varias pistas clandestinas para el trasporte de drogas a los países vecinos, así como también serían los autores de ataque a policías, y de hechos de violencia en la disputa de estructuras de tráfico de marihuana en el departamento de Canindeyú. Se descubrió además que los detenidos tenían vínculos con bolivianos, peruanos, colombianos y mexicanos y que la organización operaba simulando tácticas de cárteles de México, en especial en lo que trata el resguardo y trasporte de las drogas, donde eran utilizados varios vehículos y hombres fuertemente armados para custodiar los cargamentos e incluso figuran como una de las estructuras más sanguinarias del país.
POLICÍAS INVOLUCRADOS
Las autoridades no descartan la posibilidad de que exista un vínculo entre policías y la organización criminal. Informaron que todos los antecedentes van a ser remitidos al Ministerio Público para su correspondiente investigación.
INFORMACIÓN NO SE FILTRÓ
En una conferencia de prensa, el ministro de la SENAD, Jalil Rachid, remarcó que “fue un trabajo que se llevó a cabo en equipo, las decisiones que se tomaron se hicieron en equipo y siempre con la anuencia y el apoyo del presidente Santiago Peña. El operativo fue exitoso porque la información no se filtró. Nos abocamos a la investigación de un grupo muy organizado y bien estructurado dentro del departamento de Canindeyú que estaba causando estragos, no solamente a nivel jurídico sino que a nivel social dentro de este territorio”.
Rachid explicó que el grupo criminal contaba con una gran capacidad de fuego y una importante red logística que los respaldaba, lo que motivó que la incursión fuera llevada desde diferentes frentes para evitar que logren utilizar el armamento con el que contaban en contra de los efectivos del orden.
“Estamos hablando de un grupo que estaba jugado a causar y seguir causando estragos dentro del departamento, y por sobre todas las cosas con una tendencia a expandirse fuera de esta zona”, subrayó.
Por su parte, el ministro del Interior, Enrique Riera, comentó que este tipo de trabajos serán naturales de ahora en adelante, ya que el Estado debe de disponer de todo su poder táctico para luchar contra el crimen organizado y seguir obteniendo resultados positivos en pos de la defensa del territorio nacional. Las autoridades continúan trabajando en la investigación para recabar más información sobre la estructura y actividades de la organización desarticulada.