El ministro del Interior, Arnaldo Giuzzio, consideró este jueves que el ataque a balazos a una patrullera en San Alfredo, Departamento de Concepción, podría haber sido perpetrado por miembros del Primer Comando Capital (PCC). Dos policías y un guardia de seguridad perdieron la vida.
Un grupo de 10 a 12 personas, fuertemente armadas, realizaron una emboscada y atacaron a tiros a una patrullera de la Policía Nacional durante la tarde del miércoles en el distrito de San Alfredo, a unos 70 kilómetros de la ciudad de Concepción.
El fiscal Carlosmagno Alvarenga informó que cuatro uniformados se trasladaban a bordo del móvil por un camino vecinal y estaban a metros de salir a la ruta que une a Concepción con Vallemí cuando fueron emboscados por los criminales.
De acuerdo con los datos recogidos, el chofer aceleró para intentar evadir el ataque, pero uno de los proyectiles alcanzó a uno de los neumáticos. El conductor perdió el control y fue a parar contra el alambrado de un establecimiento ganadero.
Los atacantes continuaron disparando contra los uniformados. Al sitio también llegó otra camioneta con guardias privados de la estancia San Fernando y también fueron víctimas del fuego cruzado.
Si bien no sabe hasta el momento la autoría del grupo armado, para el ministro del Interior, Arnaldo Giuzzio, el suceso tuvo características de un posible ataque perpetrado por el Primer Comando Capital (PCC).
“Según los últimos reportes, se vio una cantidad mayor de personas en comparación a organizaciones como la ACA (Agrupación Campesina Armada). A medida que se tengan reportes del análisis balístico podríamos tener algo de la autoría. Este ataque tiene las características del PCC”, dijo en contacto con Monumental 1080 AM.
Lea más: Ataque en San Alfredo deja dos policías y un guardia de seguridad fallecidos
El secretario de Estado mencionó que el hecho aparentemente tenía como objetivo predeterminado matar a los agentes policiales, incluso se manejan versiones de que los uniformados fueron llamados para acudir hasta la zona.
«Esto fue una emboscada, nadie esperaba esta situación», agregó el ministro. Los investigadores tampoco descartan que el objetivo del grupo armado era la mencionada estancia.
El oficial Odelio Insaurralde y el subjefe de la Comisaría de San Alfredo, Dionisio Ávalos, son los policías fallecidos, mientras que el guardia de seguridad que perdió la vida es Leonino Medina.
Uno de los efectivos policiales falleció en el mismo lugar del ataque, mientras otro fue trasladado gravemente herido hasta un centro asistencial, donde finalmente no resistió a las lesiones. Otros dos agentes lograron sobrevivir.
Además, un segundo guardia de seguridad también resultó herido y fue trasladado a un hospital. Los atacantes también se apoderaron de los fusiles de los agentes policiales tras el ataque y luego se dieron a la fuga.