Ventas de terrenos y de automóviles son las más utilizadas por los ciberdelincuentes para engañar a las personas, según los intervinientes. La pandemia ayudó a la proliferación del delito, afirman.
Alrededor de cuarenta denuncias en el mes recepcionan los agentes del Departamento de Delitos Económicos de la Policía, sobre estafas telemáticas, en sus distintas modalidades.
A estos hechos se les sumó un nuevo modus operandi, que es con la supuesta venta de terrenos, que ya dejó varias víctimas, según confirmó el comisario José Velázquez.
El uniformado reveló que detectaron que una organización ofertaba terrenos a bajos precios a través de las redes sociales.
Una vez que lograban que un interesado se comunique con ellos, pedían la mitad del valor para realizar la transacción.
Cuando la víctima pagaba o giraba esa suma, el supuesto vendedor desaparecía y no volvía a atender las llamadas. Estafa consumada.
Para el jefe policial, la pandemia contribuyó al éxito de estos estafadores, ya que las restricciones impuestas hicieron que muchas transacciones se realizaran de forma telemática. “Con lo de la pandemia, muchos trámites en financieras, bancos y otros centros comerciales se hacían de forma virtual, y eso hacía vulnerables a las potenciales víctimas y potenciaba a los delincuentes”, explicó el agente, quien luego agregó: “Recepcionamos en estos tiempos infinitas denuncias de estafa, utilizando todos los medios electrónicos. Alrededor de cuarenta denuncias al mes. Está cayendo mucho la gente”, indicó el agente.
Velázquez indicó que se están realizando muchas campañas a través de los distintos medios de comunicación, pero que las personas, lastimosamente, siguen cayendo en las redes de los ciberdelincuentes.
DESDE LA CÁRCEL. El pasado 13 de agosto se realizó un operativo en el que fueron detenidas cinco personas que formaban parte de un esquema delictivo dedicado a estos hechos.
Ellos son Norma Graciela Saldívar, Froilana González González, Mario Medina Alfonso, Óscar Glizt y Miguel Ángel Benítez López, que están a disposición de la fiscala Laura Guillén.
De acuerdo con las pesquisas, ellos ofrecían el terreno de una persona que había fallecido recientemente.
El esquema funcionaba bajo las órdenes de Fabián Peralta, un hombre detenido en la penitenciaría de Tacumbú, pero que movía todos los hilos, aún estando tras las rejas. “Él era el que decía lo que se tenía que hacer y manejaba a todo el equipo”, explicó el comisario Velázquez.
Los investigadores manejan que del esquema también forman parte supuestos abogados, escribanos, intermediarios, vendedores y otros.
Las autoridades, tanto de la Policía como del Ministerio Público, instan a mantenerse alertas para no caer en las redes de las personas que se dedican a estos delitos.
Además de las estafas, que hacen perder grandes sumas de dinero a los afectados, también se tienen varios casos de extorsión, sextorsión, secuestro virtual y otros delitos que son denunciados en las dependencias especializadas y que están en auge últimamente en distintas localidades del país, afirman los especialistas.
