Son al menos 5 a 8 casos al mes que se están denunciando en la subcomisaria 12ª del barrio San Miguel de Presidente Franco y que llamó la atención de los agentes policiales, ya que muchos llegan a la sede policial, rompen en llanto y revelan que son víctimas de violencia psicológica y física. La comisario Esmelda Gamarra dijo que comunicó a sus superiores, ya que los casos son cada vez más frecuentes.

La jefa policial explicó que muchos varones se están animando a denunciar que también son víctimas de violencia y resaltó que lo que más se da son los hechos de violencia psicológica, de parte de sus esposas y también sus hijos. “Ellos vienen, a veces no saben cómo contar, lloran, pero con sus actitudes nos damos cuenta, les orientamos y ahí se abren y cuentan lo que están viviendo”, comentó la titular de la subcomisaria de Presidente Franco.

Asimismo, indicó que su zona de cobertura “es complicada” porque los casos que más se denuncian son precisamente, violencia familiar y abuso sexual en niños. Al respecto, aclaró que las mujeres siguen llevando la delantera como víctimas de violencia en poder de sus parejas y que las denuncias también se reciben a diario.

Las denuncias de los varones son de 5 a 8 casos por mes y siempre se da por cuestiones económicas, celos de la pareja o el horario laboral. “Ellos cuentan que son molestados en su horario de trabajo y si no responden el teléfono ya reciben reprimendas fuertes vía mensajes, también la falta de dinero en la casa es otro factor y hasta porque llegan un poco más tarde del trabajo son agredidos verbalmente por sus parejas”, añadió la comisario Gamarra.

VIOLENCIA FÍSICA

Sin embargo, resaltó que también los hombres están denunciando que son víctimas de violencia física de parte de sus parejas, pero también sindican a sus hijos como responsables de golpizas que reciben, en la mayoría de las veces, con ingesta de alcohol de por medio y otras cuestiones que extenúan la relación familiar.

Gamarra acotó que ya comunicó a sus superiores el caso y que todas las denuncias derivan al Ministerio Público. Según ella, sería válido contar con un profesional psicólogo en la sede policial, porque los uniformados que reciben la denuncia deben hacer hasta la tarea de contención, en ocasiones, ante el estado emocional en que llegan las víctimas.

TAREA DE PREVENCIÓN

Un recorrido en las instituciones educativas y comisiones vecinales, están orientando a la comunidad sobre las acciones a tomar en caso de conocer hechos de violencia familiar y también los de abuso infantil que ocurren con frecuencia en el sector. “Cuando nos vamos ya los propios alumnos nos hacen consultas y también se acercan los padres de familia a contar su caso, entonces los guiamos para que denuncien. Cuando saben que una persona que fue víctima y denunció, se animan y también lo hacen”, puntualizó la jefa policial.

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