La semana pasada la Armada paraguaya decomisó un gran alijo de cigarrillos productivos por TABESA en un puerto clandestino. Estaban listo para ser enviados de contrabando al Brasil. Además de la carga, lo que llamo la atención es la enorme embarcación de metal, con potentes motores fuera de borda, que tenían los contrabandistas-traficantes. El costo de la misma es millonario al igual que el valor de la mercadería incautada.
Sin duda los contrabandistas de cigarrillos vinculados al tráfico de marihuana en la frontera paraguayo-brasileño, tienen una gran infraestructura. Además de los puertos clandestinos con sistemas logísticos de abastecimiento, están las enormes embarcaciones hasta de 20 metros, como la que cayó la semana pasada en un procedimiento de la Armada paraguaya.
No hay dudas de que quienes manejan los negocios ilegales en la frontera invierten pesado para poder llevar sus cargas entre las márgenes del Lago de Itaipú.
Para la Policía Federal del Brasil el contrabando de cigarrillo, vinculado al tráfico de marihuana ya no es manejado por simples contrabandistas, sino que, por traficantes, a su vez con nexos con facciones criminales brasileños como ser el Primer Comando Capital (PCC) y el Comando Vermelho (CV).
El tamaño de la embarcación que fue decomisado la semana pasada puede ser notado cuando se observa a los efectivos militares sacando las cajas de cigarrillos de la marca “Eigth”, que son producidos por Tabacalera del Este S.A. (Tabesa), propiedad del ex presidente Horacio Cartes y que es manejado por José Ortiz Escauriza.
Esa embarcación sin duda es la prueba de cómo operan los contrabandistas-traficantes en la frontera entre Paraguay y Brasil, específicamente a través de puertos clandestinos a orillas del Lago de Itaipú.
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