El sábado pasado, el director de Vigilancia de la Salud, Dr. Guillermo Sequera, informó que desde
este miércoles 21 de julio se exigirá a los pasajeros que lleguen desde el exterior una cuarentena
domiciliaria de cinco días y un test negativo de PCR para la detección del COVID-19 tras ese
lapso, con lo que sumarían dos análisis para poder entrar al país, ya que de hecho se exige uno
para poder viajar

Este lunes, la directora de Migraciones, Ángeles Arriola, conversó con ABC y detalló que la
medida regirá, en principio, durante un mes, tras lo cual se volverá a analizar su pertinencia. Cabe
destacar que esta nueva resolución se tomó para intentar mitigar el ingreso de la variante “Delta”
del virus SARS-CoV-2, que causa el COVID-19. “Se habló que esto va a tener una vigencia de un
mes, luego volver a evaluar si hubo incidencia en el contagio y en especial lo de la variante”,
manifestó.

Arriola detalló que hubo varias reuniones con autoridades de salud y representantes de las
agencias de viaje y de las aerolíneas para poder anunciar la decisión y que, si bien no hubo
consenso en los primeros encuentros, finalmente se llegó a uno después de analizar el peligro que
supone la variante del virus.

El planteamiento ya había sido hecho por el Dr. Sequera hace tiempo, pero desde el Gobierno se
evitaba aplicar la medida hasta ahora, recordó Arriola, que explicó también que se necesitaba
tiempo para coordinar con todos los actores implicados para informar sobre la nueva medida

Uno de los motivos por los cuales se anunció esta cuarentena fue el hecho de que un compatriota
habría dado positivo al virus con esta nueva variante. “Ahí salta la alerta. Como tenemos muchos
extranjeros que van y vuelven de países en donde hay mucha circulación de Delta, se tomó la
decisión”, dijo Arriola

Control aleatorio
La directora de Migraciones señaló que los controles para el cumplimiento de esta
cuarentena van a ser aleatorios y reconoció que es imposible verificar si el 100% de los
que llegan al país cumple la resolución.
En ese sentido, recordó que en las ciudades como Ciudad del Este o Pedro Juan
Caballero la exigencia será casi imposible de cumplir y de controlar por una cuestión
“lógica” a raíz del flujo de personas que transitan por esos lugares a diario.
Sin embargo, Arriola hizo énfasis en que la medida es acertada porque “si entra esa
variante sí sería un problema para todos nosotros”.
Test rápido para los que tuvieron COVID
Arriola informó que las personas que ya tuvieron COVID solo deberán hacerse un test
rápido de COVID-19 tras terminar la cuarentena domiciliaria de cinco días. La medida sí
regirá de igual manera para quienes estén vacunados.
Finalmente, indicó que los futbolistas y los tripulantes de los aviones no deberán hacer
esta cuarentena ni los test porque forman parte de una “burbuja” sanitaria