En los últimos días, el diario La Clave viene publicando una serie de sospechosas actuaciones de jueces y fiscales que, aparentemente, dictan resoluciones bajo incentivos o dádivas para inclinar la balanza hacia donde más les conviene. Periodistas de este medio accedieron a documentos firmados por la juez penal de garantías nº 7, Fátima Burró, quien otorgó libertad ambulatoria a un peligroso delincuente y arresto domiciliario a un mecánico, detenidos en abril de este año por el robó una patrullera de la Policía Federal del Brasil que, por cierto, nunca fue recuperada. El hecho ocurrió en abril y los procesados ya están libres en menos de dos meses.

Para entender este caso, hay que remontarse al jueves 31 de marzo del 2022, cuando la Policía Federal del Brasil denunció el robo de una patrullera Mitsubishi L200, de color gris, con chapa BBN 9657, del predio de un taller mecánico donde fue dejada para mantenimiento. El móvil policial, de incógnito, fue traído al Paraguay, y al cruzar el Puente de la Amistad, la señal del GPS dejó de responder.

El 3 de abril, fue detenido en Foz de Yguazú (Brasil) el paraguayo Carlos Augusto Alegre Barrientos, con orden de captura por narcotráfico y por abuso sexual en niños, sindicado de haber sido el que hurtó la camioneta del taller mecánico donde prestaba servicio como mecánico.

El 6 de abril, fue detenido en Paraguay, Ever Francisco Barreto Ferreira, alias “Gallo”, con orden de captura por reducción y antecedentes penales por robo agravado, hurto, hurto agravado, reducción en incumplimiento del deber legal alimentario. Mientras que en el Brasil también tiene antecedentes por hurto, reducción y asociación criminal. El día del procedimiento se incautó de su poder un automóvil Hyundai Elantra, de color plata, con chapa BRU 011, en el que circulaba; G. 7.750.000 y un aparato celular Iphone 11. Este hombre sería el líder de la banda, según agentes del Comando Tripartito de la Policía Nacional.

Al día siguiente, es decir, el jueves 7 de abril, fue aprehendido en Presidente Franco, el mecánico Denis Dionisio Sánchez Fernández, quien habría recibido la camioneta robada en su taller para desactivar el rastreo satelital. El 8 de abril, ambos detenidos fueron procesados por “reducción y otros” por la fiscal Zunilda Ocampos y la juez Fátima Burró le puso la firma para que los dos vayan a la cárcel.

ARRESTO DOMICILIARIO

Mediante el oficio nº 320, de fecha 28 de abril del 2022, es decir, 20 días después de la imputación, la juez Fátima Burró otorgó arresto domiciliario al mecánico Denis Dionisio Sánchez Fernández, con una caución real de G. 50 millones y prohibiciones que nunca se cumplen.

LIBERTAD AMBULATORIA

El presunto cabecilla de la banda implicada en el robó nada más y nada menos que de una patrullera de la Policía Federal, Ever Francisco Barreto Ferreira, alias “Gallo”, con una sarta de antecedentes, tuvo mejor suerte y consiguió “libertad ambulatoria” mediante la resolución nº 460, de fecha 10 de junio de 2022, firmada por la misma magistrada. El oficio prevé supuestas reglas y prohibiciones, como por ejemplo, firmar el libro de comparecencias del 1 al 5 de cada mes, presentarse ante el Ministerio Público las veces que sea requerido, prohibición de acercarse a los demás procesados, y no comunicarse con ellos por redes sociales. Asimismo la prohibición de portar cualquier tipo de armas y el consumo de bebidas alcohólicas, Sin embargo, este último punto requisito ya fue violado por el procesado, quien, el domingo último, estuvo en una cancha de piky vólei consumiendo abundante bebida alcohólica, motivo para revocarle la libertad ambulatoria, pero es casi seguro que la magistrada no tomará determinación alguna. Lo que llama la atención en este caso es el criterio que tomó la juez Burró para conceder libertad total a un sujeto sindicado como cabecilla, mientras que arresto domiciliario al mecánico, teniendo en cuenta que el primero tiene varios antecedentes en nuestro país y en el Brasil, y el otro ninguno.

¿DÓNDE ESTÁ LA PATRULLERA?

Lamentablemente Paraguay queda mal parado como país ante el Brasil, pues los procesados ya están libres, y la camioneta nunca fue encontrada. Del otro lado del puente, el que robó la camioneta, Carlos Augusto Alegre Barrientos, sigue preso, mientras que en territorio paraguayo sus cómplices están libres y probablemente analizando un nuevo golpe que asestar para recuperar los gastos que conllevaron recuperar su libertad.

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