El Gobierno impulsa una incursión sin precedentes en la Penitenciaría Nacional de Tacumbú, a fin de recuperar el control institucional en la penitenciaría. Unos 2.500 efectivos militares y policiales están involucrados en el “Operativo Beneratio”. Durante el procedimiento falleció un agente del grupo Lince.
A tempranas horas de este lunes, fuerzas de seguridad proceden a un operativo de intervención en la Penitenciaría Nacional de Tacumbú, de la ciudad de Asunción.
El Ministerio de Justicia informó que el objetivo es la erradicación de los privilegios y potestades de las bandas criminales en la operación de este penal, una mejor distribución de internos y la presencia institucional y efectiva del Estado en un territorio parcialmente secuestrado por la criminalidad desde hace años.
Al respecto, el viceministro de Política Criminal, Rodrigo Nicora, mencionó que hasta el momento no se tiene confirmación si hay heridos o fallecidos adentro del penal, «cuando se pueda avanzar y ver vamos a poder dar detalles», subrayó en entrevista con la radioemisora 730 AM.
En ese misma línea, indicó que hay tres policías heridos, uno de ellos de gravedad porque recibió una herida de bala en la columna. “Aún no se puede hablar sobre las consecuencias médicas que podría tener esto», subrayó.
Asimismo, explicó que no se tiene información, hasta ahora, de que haya rehenes en el penal y que la mayoría de mujeres que estaban de visita pudieron salir.
Detalló que del operativo forman parte efectivos de varias fuerzas de la Policía Nacional, Fuerzas Armadas de la Nación, Ministerio del Interior, Ministerio de Defensa Nacional, Secretaría Nacional de Inteligencia, además de otras instituciones y servicios estatales y civiles.
Se trata de la incursión policial-militar más grande de los últimos tiempos y para ello, fueron desplegados 1.500 policías y 1.000 militares, a los efectos de lograr la recuperación integral del control institucional en la principal penitenciaría del país.