Hasta el momento, no existe reinfección por chikunguña, de acuerdo a la literatura internacional, sin embargo, hay cuadros sospechosos en estudio.
“Estamos viendo algunas sospechas de gente que tuvo chikunguña en diciembre y aparentemente ahora vuelve a tener”, puntualizó el Dr. Guillermo Sequera, director de Vigilancia de la Salud.
Al respecto, señaló que hay cerca de una decena de cuadros sospechosos que se investigan para conocer si se trata de una prolongación de la presencia del virus en la sangre. De ser así, “no es reinfección”, aclaró.
En ese contexto, Sequera mencionó que puede que la persona se haya hecho en un primer momento un test PCR que dio positivo, y luego de dos meses, por presencia de síntomas compatibles con chikunguña, se realiza otro análisis.
“Por ejemplo, un estudio de anticuerpos, que en realidad lo que muestra es la huella inmunológica de la infección que tuvo antes”.
Aseveró que este tipo de caso es investigado por el Ministerio de Salud y otras Sociedades Científicas.
El epidemiólogo advirtió que actualmente el riesgo de chikunguña es grave, hecho que pone en peligro al resto de la región.
Afirmó que el virus se encuentra en Paraguay de forma exclusiva, pero puede diseminarse a otros países, tal y como se está expandiendo dentro del territorio nacional.
Ante este escenario, declaró que el primer paso adoptado por el país fue comunicar a los demás vecinos y al mundo, que algo inusual está ocurriendo. “Las investigaciones ya iniciaron, los resultados pueden demorarse semanas o meses para contar con la certeza lo que está ocurriendo”.
Recordó que una situación similar a la de Paraguay experimentó Brasil tiempos atrás con el zika, cuando demostró que este virus producía microcefalia.
“El mundo no lo creía porque no estaba en la literatura. Por consiguiente, pasaron semanas y meses de investigación de casos para finalmente contar con la certeza de que esto era así”.
Mientras siguen las investigaciones, el recomendó continuar con las medidas de protección: consulta oportuna, eliminación de criaderos y el uso de barreras de protección, de forma a reducir y mitigar el impacto de la epidemia de chikungunya en el país.
FUENTE: HOY
