En audios filtrados se registra a un supuesto policía que se ofrece para formar parte de los negocios de los miembros de la organización que fue imputada por el megacargamento de cocaína de unos 3.400 kilos, en Fernando de la Mora, el 27 de julio de 2021.

Juan José Dubini mantenía comunicaciones con el posible uniformado identificado en el informe de la Senad como Luis. En una llamada realizada el 14 de julio, unos 13 días antes del allanamiento al depósito de los Dubini con la carga récord de cocaína, Luis recibe la llamada de Dubini al teléfono, y el policía se ofrece para el trabajo y destaca que por el momento está realizando negocios “legales” y reitera que está dispuesto y al aviso de cualquier movida.

En una parte de la conversación, Dubini le comenta que posiblemente la otra semana tendría algo, por lo que le estaría avisando. Luis se despide poniéndose al servicio. “Avisame nomás, estamos prestos y vamos a ver qué hacemos, vamos a mirar qué hay y te aviso. Avisame nomás, yo estoy dispuesto”, resalta al final de la llamada.

Tras una conversación casual sobre el caótico tráfico sobre Mariscal López, Dubini le comenta a Luis que está con la exportación de ka’a he’ê con unos clientes suizos en Colonia Independencia. Luis le consulta: “Estos están contigo en tu negocio, chera’a”, a lo que Dubini le responde que no, que son clientes de antes y enfatiza: “Es todo legal, por el momento”. El designado como policía contesta con sorpresa a su vez: “Yo ko estoy haciendo algo legal también un poco ahora”.

La charla continúa y Dubini inquiere a Luis sobre lo que sería un contacto al que describe como “tu amigo, el morocho”. Luis le explica que ya está todo, que ya se cobró y que ya está de nuevo en otro lugar y además que “llegó uno nuevo otra vez”.

Según el reporte detallado, la comunicación se repite durante las próximas semanas en reportes más cortos y con algunas comunicaciones fallidas.

Audios de Dubini

Una serie extensa de audios hablan del esquema de los organizadores del cargamento incautado en el depósito en Fernando de la Mora. En la supuesta organización resuenan los nombres de Juan José Dubini Franco (padre) y Juan José Dubini Verdún (hijo); además de Alberto Julián Martínez, apodado “El gordo”, así como de Bruno Vicente Ciancio, sindicado como uno de los jefes. El equipo refiere que se prepara para un envío de 12 contenedores con la capacidad de 800 bolsas cada uno, el procedimiento se realiza en las instalaciones de Fernando de la Mora. La exportación sufre unos inconvenientes de papeleo en el despacho y el envío se retrasa programando dos tandas de 6 contenedores. La organización es en tanto allanada antes de concretar el negocio. Según relatan, la vía de envío sería a través del puerto de Montevideo, Uruguay, canal que considera de mayor costo ante el habitual de Buenos Aires, Argentina.

Gajes del oficio

A solo días de culminar la carga de dos contenedores con azúcar orgánica, como base para los panes de cocaína encontrados para el envío en el depósito alquilado por Dubini, uno de los camiones que ingresa al lugar tiene un accidente atropellando a una camioneta. En un audio anecdótico, Juan José Dubini Franco y Juan José Dubini, padre e hijo respectivamente, debaten sobre la urgencia de sacar el camión del recinto, ya que al estar involucrado en el roce debe permanecer a la vista de la Policía. En eso se encuentran cuando Juan José (hijo) refiere que de hecho la policía se encuentra frente al lugar con el chofer del rodado, que tiene consigo los papeles. Momentos de tensión sufren los Dubini con el percance frente a su centro de operaciones, con una patrullera con tres efectivos haciéndose cargo de las negociaciones entre la señora de la camioneta afectada y el chofer del camión.

ATENTO. Dubini dice al policía que en breve surgirá algo y este contesta que estará presto.

ORGANIZACIÓN. Preparaban unos 12 contenedores con azúcar como base para el envío al exterior.

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