Se trata de una laminadora que está en el km 7 Acaray de Ciudad del Este y los pobladores lamentan que las denuncias que realizaron en el Ministerio Público, hasta el momento, no impidió que la firma siga operando y vertiendo sus desechos al arroyito que pasa por detrás del fábrica, dentro de un pequeño bosque.
Los pobladores, hartos del atentado contra el Medio Ambiente que impunemente realiza la empresa desde hace varios años, han realizado filmaciones que entregaron a los medios de comunicación, donde se ve que un líquido rojo y espumoso es el que cae al cauce hídrico, destruyendo toda la fauna ictícola y un olor nauseabundo que molesta a todos.
Los ductos y el registro tampoco son de buenas condiciones, todo es improvisado en el trayecto que cruza por un bosquecito, donde según los vecinos, el cauce del arroyo era mayor, pero ahora son hilos de agua contaminada a causa de la desidia de las autoridades para hacer cumplir las leyes ambientales y la falta de respeto a los recursos naturales de parte de los empresarios.
DOS DENUNCIAS
Los vecinos presentaron dos denuncias ante el Ministerio Público, pero hasta el momento no se tomaron medidas contra los responsables de este daño ambiental. Otro de los inconvenientes también reclamados es la quema de restos de madera, aunque el sitio cuente con un enorme horno, los vecinos reclaman de la humareda, siendo que el lugar suele ser utilizado para la destrucción de drogas que son incautadas en procedimientos de la Fiscalía.
“Lo que nosotros pedimos es que vengan los fiscales y constaten cómo están destruyendo, contaminando todo a su paso. No es posible que no tengamos respuestas de las autoridades, es inconcebible que a la vista de todos estén haciendo esto”, reclamó un vecino que se encargó de grabar videos mostrando el daño ambiental ocasionado.
En noviembre del año pasado, el fiscal Adolfo Santander había intervenido el local, pero la causa no avanzó, las irregularidades persisten y los pobladores insistieron con una nueva denuncia que ahora está a cargo del fiscal Orlando Quintana. Mencionaron que también van a recurrir al Ministerio del Ambiente (MADES) con una denuncia sobre el tema.
La contaminación del cauce es, además de lo vertido por la laminadora, también por la cantidad de residuos de todo tipo, botellas de plástico, latas y hasta animales muertos, en algunas ocasiones. Los pobladores quieren promover una minga ambiental, pero con las garantías que el Ministerio Público, avanzará en las investigaciones y castigará a los responsables del caso.
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